lunes, 4 de octubre de 2010

LIE TO ME

Y puedo sentir la mentira antes de que esas palabras salgan de tu boca, antes de escuchar siquiera la primera frase, hasta sin verte la cara.

No te das cuenta que cuando mentís te haces chiquito, te quedás cada vez mas solo, se te nota y quedás en evidencia.

El tono te delata, tu cara se transforma y no lográs ser coherente. Te olvidás lo que alguna vez dijiste, y te contradecís sin darte cuenta.

El problema fundamental es que una vez que la primera mentira fue descubierta, me veo obligada a dudar de cada cosa que me decís, por más insignificante que sea. Se genera una molestia irreversible pero completamente evitable.

Me duele que mientas, me pone triste que me creas tan tonta como para creerte y me da bronca que no puedas dejar de hacerlo.

No, ahora no te creo y no puedo evitar quererte cada vez un poco menos.

1 comentario: