Hablando de KARMA, les voy a contar algo que le pasó a una de mis amigas, que es una fiel creyente de esta filosofía.
Hay sucesos dentro de nuestra vida que son inexplicables para nosotros, buenos o malos, acontecimientos que se repiten una y otra vez a lo largo de nuestra existencia, ¿Casualidad?.
Es una Ley Universal que nos enseña que por cada acción nuestra habrá una reacción lógica. Todos nuestros actos tienen una consecuencia necesaria. El Karma es el resultado de nuestras acciones pasadas, es la ley que involucra una reacción igual y en sentido contrario para cada acción.
Mi amiga volvía de un viaje de caridad que hizo con la ONG que trabaja. Eran las once de la noche y llovía. Hacía cuatro días que no dormía ni se bañaba, pero estaba felizmente sucia por la experiencia que había vivido. No tenía plata para un taxi y el colectivo no llegaba.
Empieza a caminar y ve a un hombre con una escalera todo empapado. Ven un taxi y los dos lo paran al mismo tiempo.
Ella lo mira, le da pena que estuviera cargado y cuando el taxi para, ella le dice: “Tomálo vos! No hay problema, yo espero al que sigue.”
Él le responde: “No, tomálo vos! No hay problema”
Ella usando su lógica pregunta: “Para dónde vas?”
Él: “Para Belgrano, pasando barrio River.”
Ella: “Yo también. Porqué no nos tomamos el taxi juntos y compartimos los gastos?”
Él: “Dale, buenísimo.”
El taxista estaba anonadado por la situación bizarra que estaba viviendo. Dos personas que no se conocían estaban compartiendo un taxi en Buenos Aires, que convengamos, es una locura total. En el viaje charlaron de la vida y se mataron de risa.
Cuando llegan a la casa de mi amiga, ella les dice que no tenía plata y les pide por favor que la esperen mientras entraba a su casa para buscar.
A mi amiga la vida le sonreía de tal manera, que el chico le dijo: “Quedáte tranquila, total… tu casa me quedaba de paso para la mía, no me debés nada!”
Mi amiga saluda con un beso al desconocido que la llevó a su casa y ya que estaba, le terminó dando un beso taxista también.
Este es un ejemple de que si hacés algo bueno, cosas buenas te van a pasar.
Hay sucesos dentro de nuestra vida que son inexplicables para nosotros, buenos o malos, acontecimientos que se repiten una y otra vez a lo largo de nuestra existencia, ¿Casualidad?.
Es una Ley Universal que nos enseña que por cada acción nuestra habrá una reacción lógica. Todos nuestros actos tienen una consecuencia necesaria. El Karma es el resultado de nuestras acciones pasadas, es la ley que involucra una reacción igual y en sentido contrario para cada acción.
Mi amiga volvía de un viaje de caridad que hizo con la ONG que trabaja. Eran las once de la noche y llovía. Hacía cuatro días que no dormía ni se bañaba, pero estaba felizmente sucia por la experiencia que había vivido. No tenía plata para un taxi y el colectivo no llegaba.
Empieza a caminar y ve a un hombre con una escalera todo empapado. Ven un taxi y los dos lo paran al mismo tiempo.
Ella lo mira, le da pena que estuviera cargado y cuando el taxi para, ella le dice: “Tomálo vos! No hay problema, yo espero al que sigue.”
Él le responde: “No, tomálo vos! No hay problema”
Ella usando su lógica pregunta: “Para dónde vas?”
Él: “Para Belgrano, pasando barrio River.”
Ella: “Yo también. Porqué no nos tomamos el taxi juntos y compartimos los gastos?”
Él: “Dale, buenísimo.”
El taxista estaba anonadado por la situación bizarra que estaba viviendo. Dos personas que no se conocían estaban compartiendo un taxi en Buenos Aires, que convengamos, es una locura total. En el viaje charlaron de la vida y se mataron de risa.
Cuando llegan a la casa de mi amiga, ella les dice que no tenía plata y les pide por favor que la esperen mientras entraba a su casa para buscar.
A mi amiga la vida le sonreía de tal manera, que el chico le dijo: “Quedáte tranquila, total… tu casa me quedaba de paso para la mía, no me debés nada!”
Mi amiga saluda con un beso al desconocido que la llevó a su casa y ya que estaba, le terminó dando un beso taxista también.
Este es un ejemple de que si hacés algo bueno, cosas buenas te van a pasar.
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